domingo, 20 de noviembre de 2011

¿HAY FUTURO PARA EL TABACO? (G1)

Damaris Tobía y María Yañez

· El pasado del tabaco: sus hayazgos y evolución:

Cuando el tabaco fue descubierto por dos marinos españoles que, cumpliendo ordenes de Colón, exploraban el interior de la isla de Cuba, hacía ya un mes que la Pinta, la Niña y la Santa María habían tocado tierra. Fueron las playas de San Salvador el escenario del gran hallazgo del tabaco. Cuando los dos marinos llegaron a la orilla, los nativos les recibieron con frutas, jabalinas de madera y ciertas "hojas secas que desprendían una peculiar fragancia.

Fue uno de estos dos marinos, Rodrigo de Jerez, quien a su vuelta a España no dudó en introducir la costumbre de fumar tabaco, por lo que tuvo que pagar un alto precio: la Inquisición lo encarceló por practicar algo pecaminoso e infernal...

Aunque al principio fueran exclusivamente las clases adineradas quienes consumían tabaco, el hábito se puso de moda y en el siglo XVI era adquirido por todo tipo de clases sociales, distinguiendo el uso de la pipa entre las más elevadas símbolo de elegancia y el rollo de hojas entre las más populares, una escusa para tomarse un descanso del trabajo. Además, poco después surge un tema de gran relevancia: el consumo de tabaco por parte de la mujer. Con ello mostraban su liberación y era signo de una sociedad que poco a poco se transformaba.

En esta progresiva expansión del uso del tabaco, las industrias tabaqueras han tenido un elevado protagonismo, puesto que fueron las principales promotoras de la universalización de su consumo, obteniendo excelentes beneficios y erigiendo auténticos imperios económicos que en los últimos años se sienten amenazados en muchos países a causa de la legislación restrictiva de su publicidad y consumo, al tiempo que deben hacer frente a notorios pleitos multimillonarios, interpuestos por fumadores que han visto quebrantada su salud como consecuencia directa de su consumo.


· El futuro del tabaco: ¿acabará su consumo de forma total?

El debate que surge acerca del consumo del tabaco ocasiona grandes controversias y opiniones así como distintos puntos de vista sobre el futuro que a este le espera. En el pasado se han asociado propiedades terapéuticas al tabaco, sin embargo en los últimos tiempos se ha comprobado que el hábito de consumir tabaco es nocivo para la salud, tanto para quienes lo fuman de forma habitual, fumadores activos, como para quienes sin quererlo lo hacen, fumadores pasivos, por eso han proliferado restricciones desde diferentes organismos.

No obstante, es uno de los productos del mercado que mueve mayores cantidades de dinero repartidas en distintas áreas. El proceso de producción del tabaco tiene un inicio que viene dado por su cultivo y distribución, existen, por tanto, personas que en el fondo se benefician poco de todo ello aún siendo su aportación la más dura de todo este camino. Por otro lado, contamos con las compañías tabacaleras, quienes mueven casi todo el dinero. Por último y no menos importante, los gobiernos, quienes cuentan con una doble cara; a priori aprueban leyes cada vez más duras y restrictivas en cuanto a su consumo y lanzan campañas de concienciación pero a su vez obtienen grandes beneficios a través de los impuestos que recaudan.

Ante todo lo mencionado y existente, así como lo que está por llegar, pensamos que el tabaco puede llegar a desaparecer, igual no de una manera radical y seguramente lleve su tiempo, pero si de cara al público acabará siendo una sustancia “non grata”. No obstante, ¿serán los gobiernos capaces de hacer desaparecer por completo algo que genera tanto dinero, aún mostrando su descontento y su mal hábito para la salud? ¿Tantas restricciones provocarán en el consumidor un cambio de mentalidad que implique dejar su consumo o por el contrario hará ciudadanos más reivindicativos? ¿Por qué la gente sigue consumiendo tabaco si todo apunta a que es un mal hábito?

Nosotras como fumadoras activas, nos hemos creado la necesidad de fumar, sin saber cual es el punto que activa nuestro deseo, nos es indispensable en ciertos momentos, sobre todo de estrés o agobio, a sabiendas de que es malo, quizá por que al ser jóvenes pensamos ser inmortales, y que las enfermedades solo son para adultos, habiendo comenzado a penas hace unos años, cuando fumar era lo “que molaba” o por lo menos eso aparecía en series y películas. Creemos que la culpa de todo la tiene un conglomerado de actores, quienes querían ganar dinero y lo han conseguido dando lugar a personas que no son capaces de dejar un mal vicio. Los gobiernos nunca optarán por prohibir el tabaco de forma total, pierden más de lo que ganan, por mucho que hablen de sanidad.

8 comentarios:

  1. Haciendo referencia al texto:
    Si bien es cierto, que el gobierno intenta lavar ese doble juego que realiza mediante la emisión de ciertas campañas sociales que promueven el fin del consumo del tabaco, también es cierto que el gobierno no es el que nos inculca el hábito de fumar.

    Quizá hace años podríamos llegar a ex culparnos debido a la poca información que había sobre los graves efectos que provoca en nuestra salud, o incluso podríamos atribuir el hábito de fumar a la televisión que como agente socializador, no hacía más que marcar un patrón que seguía la mayoría de la gente.

    Pero pese a todo esto, el tabaco continúa estando vigente en nuestra sociedad, y dudo mucho que su fin llegue de manera próxima.

    La gente que fuma, dice que lo hace porque le gusta, y cuando le preguntas "¿Por qué empezaste a fumar?" la gran mayoría de las personas de nuestra edad, responden que por la tontería. Con ello hago referencia a la primera parte de vuestro comentario cuando hacéis referencia al consumo del tabaco que consume la clase adinerada y que pronto se convierte en una moda.

    Desde mi punto de vista, actualmente esa moda sigue latiendo con bastante fuerza, el cigarrillo en muchas fotografías es sinónimo de elegancia. Tener un cigarro en la mano comienza como una muestra de "lo mayor que eres y lo independiente que te sientes", y termina convirtiéndose en un mal hábito que no hace más que crearte una adicción y perjudicarte en todos los sentidos.

    Para terminar, decir que mucha gente puede llegar a fumar por el hecho de que toda la vida se ha estado haciendo, y continúan haciéndolo pensando en el tabaco como un síntoma de caché social, cuando a día de hoy (y no pretendo que ningún fumador se sienta ofendido) conociendo toda la información del tabaco, lo único que transmite esa gente es una ignorancia total.

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  2. Excelente redacción, muy bien sintetizada y expuesto el caso. Tienes toda la razón al comentar que el tabaco aun siendo nocivo para la salud es una fuente de ingresos enorme para el estado, es bien sabido que un alto porcentaje de su precio son impuestos. Las tabaqueras lo saben y tratan de vender más disminuyendo el precio del tabaco, pero sin embargo cada año sube mas por los impuestos que conlleva. Al final llegaremos a casos como en Inglaterra, donde el paquete de 10 cigarros te cuesta casi 9 libras (12€) y se lo permiten tan sólo unos pocos mientras que la mayoría de gente dejó de fumar.

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  3. Lucía, estoy muy de acuerdo con tu posición, aunque en ningún momento queremos culpar al gobierno de ser el responsable de nuestro hábito de fumar, simplemente opinamos que detrás de tantas campañas publicitarias realizadas con el propósito de que dejemos de fumar y que el tabaco mata, y tantas restricciones, en el fondo, eso les genera un beneficio, que no creo estén dispuestos a perder, aunque las pérdidas en sanidad sean elevadas por enfermedades provocadas por el tabaco, sigo pensando que los beneficios que se generan son mayores, pero eso, no lo cuentan.

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  4. Muchas gracias por las publicaciones ante todo, con esta entrada queremos conocer vuestra opinión, ya sea como fumador o no. En mi caso, por ejemplo, si soy fumadora y voy a discrepar de la opinión de lucía ya que no me creo ignorante total, conozco toda la información que se da pero aún así sigo fumando, como muchos más, ¿que por qué es? pues bien, muchos podrán responder " de algo tendré que morir", cosa que yo no diré, pero si tengo que decir que fumar para mi es un momento de evadirme, de relajación, desconecto, por un momento disfruto y paro el tiempo. Que esa sensación me la puede dar también un baño de sales en una bañera en mi casa, pues si, pero no es lo mismo, creo que cada uno vive el "momento cigarro" de distinta manera, yo soy de las que fuman 4 o 5 pitillos al día, no mucho, pero lo poco que lo hago lo disfruto, la pena es cuando el que lo hace ya es por habito o rutina, que seguramente no lo disfrutaran como yo.

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  5. ¿Respecto al consumo del tabaco? Pues teneis toda la razón del mundo diciendo que no va a desaparecer por completo. Efectivamente es así. Vengo de una zona donde la gran mayoría de la gente tiene terrenos donde plantan tabaco o gente que trabaja para esa otra gente que tiene tierras con plantaciones de tabaco. No os podeis imaginar lo duro que es el simple hecho de recoger tabaco, a lo que se le denomina "repelar". Son muchas horas de trabajo al sol en pleno agosto, sin estar bien remunerado. El estado quiere quitar las subvenciones que se le da a esta gente, por el simple hecho de que "fumar es malo". ¿No se dan cuenta que a costa de esto ganan una inmensidad de "pasta"? ¿os pensais que van a ser capaces de quitarlo por mucho que estén subiendo los impuestos? no señor, cuanto más suban, más dinero ganan, pero aun así con la dependencia de la gente no van a poder, pero con lo que tal vez sí puedan sea con el bolsillo de los consumidores. Y lo peor de todo ¿no se dan cuenta que si hacen que el tabaco desaparezca le puede quitar el trabajo a más de una población? De estas cosas nadie habla, todo queda en el aire.
    "¿Sabes que fumar es malo?....Pues habrá que morir de algo..." Este es el lema de los jóvenes de ahora ¿verdad?. No somos inmortales, pero tampoco nos damos cuenta que hay otras cosas que también nos pueden perjudicar al mismo nivel que el tabaco.

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  6. yo no soy fumadora, mas bien soy fumadora pasiva y desde mi punto de vista, aunque puede que me equivoque, creo que es muy complicado dejar el vicio del tabaco, la gente mayor no lo deja por que es algo con lo que ha estado toda la vida y con ello van a seguir, los jovenes sobre todo menores de 18 que empiezan por diversion y sociavilizarse, ni ven los riesgos que el tabaco conlleva y si les ven tampoco piensan que eso les vaya a pasar a ellos porque en el fondo todos creemos que las enfermedades surgen cuando eres mayor y no con 16 años...

    es como un proceso para todos igual, de joven empiezas siendo un poco ignorante sobre el tema, de un poco mas mayor lo intentas dejar con pocos resultados en la mayoria de los casos y pasado unos años ya piensas "total, ya he vivido muxo ya si eso en la proxima vida no empiezo..."

    tambien estoy muy de acuerdo con mery y ruben sobre el alto porcentaje del precio de cada caja que va al estado. no creo que ese ingreso el gobierno le quiera quitar y menos ahora que necesitamos urgentemente dinero para resolver nuestra deuda

    hablaron hace unos dias sobre que si el PP que ahora esta en el gobierno, modificaria la ley anti tabaco impuesta este año.
    no creo que debiera hacerlo, es un tema que ha dado muchas vueltas pero que ya esta zanjado, mucha gente y sobre todo hosteleros se han quejado (y con razones) de ese gasto innecesario que tuvieron que hacer hace nada en sus establecimientos para proporcionar zonas de fumadores y de no fumadores, pero lo cierto es que sorprendentemente nos hemos adaptados muy rapido y muy bien a este nuevo sistema.

    lo que a mi mas me molesta del tabaco es el hecho de que perjudica no solo al que fuma sino al que esta a su lado que en mas de una ocasion es el que ha terminado teniendo cancer de pulmon, pero hay tantas cosas nocivas para el ser humano...el tabaco quiza sea lo mas facil de culpar pero y la contaminacion de los coches?? y todas estas nuevas redes de internet??

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  7. Es una temática muy compleja y se pueden abordar múltiples cuestiones. Por esa razón,. yo me voy a centrar en responder a las preguntas que habéis planteado directamente en el texto.

    Lo primero que he de decir es que soy fumadora, aunque he dejado de fumar por bastante tiempo en varias ocasiones. Ahora mismo no estoy en período sano :-)

    ¿Serán los gobiernos capaces de hacer desaparecer por completo algo que genera tanto dinero, aún mostrando su descontento y su mal hábito para la salud?
    El Gobierno debe fomentar cualquier tipo de campaña preventiva de conductas no saludables. Es su responsabilidad y la viene cumpliendo de una manera bastante satisfactoria. Sin embargo no tiene ni la responsabilidad ni la posibilidad siquiera de eliminar el hábito, independientemente de que le genere muchos o pocos ingresos vía impuestos. Su única arma para erradicar la conducta es la prevención (y la lleva a cabo). No he visto que en ningún caso lo promocione mirando más por sus ingresos que por la salud pública.

    ¿Tantas restricciones provocarán en el consumidor un cambio de mentalidad que implique dejar su consumo o por el contrario hará ciudadanos más reivindicativos?
    Depende de variables importantes como la edad. Las restricciones causan efectos diferentes en función del público destinatario. En relación a las nuevas generaciones que aún no fuman, creo que el efecto es la reducción de riesgo de empezar a fumar. En relación a personas jóvenes o de edad media (de 40 a 50 años), creo que el efecto es una bajada de tasas de personas fumadoras. En relación a personas de más edad, los efectos son prácticamente nulos o tirando más hacia la reafirmación como fundadoras.

    ¿Por qué la gente sigue consumiendo tabaco si todo apunta a que es un mal hábito?

    Por ausencia de síntomas aparentemente graves, por la sensación de que se ha fumado durante poco tiempo como para que los efectos sean importantes o durante mucho como para dejarlo ahora, por la dependencia física y sobre todo psicológica, por ser una oportunidad para establecer contacto con otras personas en algunos entornos como trabajos solitarios o momentos de ocio como las puertas de los bares...

    Esa es mi opinón :-)

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  8. En primer lugar y como todos os habéis identificado, tengo que decir que yo no soy fumadora, pero he convivido con personas que fumaban más de una cajetilla al día y no es nada agradable.

    Este tema es muy controvertido, pero creo que en el aspecto económico del negocio del tabaco-gobierno no es tan beneficioso para el estado como parece.

    El gobierno recibe muchos impuestos del tabaco, y menos mal que lo hace, porque si no lo hiciera a ver cómo iba a pagar toda la atención que los fumadores se llevan de la salud pública, en campañas de publicidad, comunicación, etc.

    Según datos del 2010, el tabaco supone (sólo) a la sanidad pública un gasto de 7.695,29 millones de euros y unas 50.000 vidas al año, de las cuales 1.400 son fumadores pasivos; además es responsable de más del 95% de las muertes por cáncer de pulmón; del 90% de las bronquitis y del 30% de las cardiopatías coronarias. Por su parte el estado recaudó en 2010 7.966,1 millones de euros que corresponden al impuesto especial sobre las labores del tabaco.

    Si hacemos la resta la diferencia económica no es mucha, desde luego, pero en esta resta no se han cuantificado la cantidad de personas que han muerto por esta causa, y que desgraciadamente es la mayor pérdida.

    Recapacitemos, el tabaco es una elección de una muerte lenta que han elegido unos pocos pero que nos afecta a todos.

    Fuentes: www.elpais.com http://www.elpais.com/articulo/sociedad/muerte/anual/1400/fumadores/pasivos/fundamenta/reforma/legal/elpepisoc/20100109elpepisoc_3/Tes
    www.abc.es
    http://www.abc.es/20110119/sociedad/abci-impuestos-tabaco-201101190130.html

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